27.12.13

Ni tanto, ni tan poco.

Último encuentro del año de Casa Cuna Cuenteros en el Hospital de Niños Pedro de Elizalde de Buenos Aires, Sala de Hemato Oncología Infantil.
La dupla: Verónica Alvarez Rivera - Selva Bianchi.
Según palabras de Vero: "cuentos de pequeños y de gigantes, pequeños que luchan como gigantes, y que no sienten miedo si van junto a su familia y tienen derecho a estar asustados y taparse con las frazadas. (contamos “Vamos a Cazar un Oso” de Michael Rosen y Helen Oxenbury).
Orugas que se convierten en mariposas, como la
“La pequeña oruga glotona” de Eric Carle. "Doña Clementina Queridita, la Achicadora" de Graciela Montes y pequeños libritos para anotar deseos. Subimos con Jack la planta de habichuelas mágicas, para sentir que podemos enfrentar a un gigante. Entendimos el “¿Por qué los elefantes prefieren jugar a la mancha?” (de Silvina Rocha y Mey) y comprendimos porqué es mejor que “Mucho y poquito” (de Silvina Troicovich)  vayan de la mano. Susurradores de buenos deseos, poesías divertidas y una visita a los chicos internados en el CEM 6 en donde asomaron sonrisas, risas y quedaron libros para los chicos y los papis que acompañan largas jornadas de internación.
Ahí los libros, ahí los cuentos, ahí los amigos de las editoriales, los escritores e ilustradores que donan material de lectura para que los chicos que atraviesan enfermedades tengan momentos de esparcimiento y relax. Ahí los cuentacuentos para hacer de este oficio una caricia para el alma." aquí fotos

26.12.13

Todo un mundito

"Entonces doña Clementina se dio cuenta de que las hueveras eran muy útiles para conservar achicados."
Doña Clementina Queridita, la Achicadora - Graciela Montes

16.12.13

Picnic de palabras 3

El domingo 15 de diciembre compartimos nuestro último Picnic de palabras del año. Fue un día de mucho calor y no fue fácil que los chicos se acercaran. Los pocos que estaban en la plaza, jugaban llenado bombitas de agua. De a poco fueron tentándose y conseguimos refrescarnos entre libros y alguna gotita pasajera. 
Tuvimos, además de la visita de queridos amigos, familia y vecinos del barrio, a nuestras invitadas especiales, la ilustradora y escritora Silvina Troicovich y la narradora Alejandra Alliende. Ale vno con su hijo Nacho y a trajo su libro "Heidi". Nos contó que cuando era chica le gustaba dibujar y otras cosas, pero la lectura la dejaba para su hermano. Hasta que un día... fueron a la feria del libro y su papá le dijo "Mirá... está Heidi... y éste es el verdadero". Buscó la edición más linda, la que tenía lustraciones más bellas y éste fue el libro que despertó sus ganas de leer. El mismo libro que trajo al picnic. Nos contó que su papá le leía poesías que a ella no le gustaban pero que se las aprendía porque era el momento de estar con él. Y también que su mamá le contaba 'cuentos-chiste', esos cuentos que tal vez no son para contarle a otro, pero que tienen como protagonistas a los hijos y situaciones familiares y que hoy con su hijo Nacho leen cuentos durante el desayuno. Un cuento o la continuación de una novela es la fórmula para despertarse y empeza el día. Leyó "Plan para lo que más me importa" del último libro de Luis María Pescetti, "Unidos contra drácula", y después de un ejercicio descontracturante al compás de "salpico, salpico, así , así así..." nos narró "Cu Canguro de Gabriela Keselman y Nora Hilb".
Silvina, vino acompañada por su esposo y por
la escritora Mariana Kirzner, autora del nuevo libro "Boutique para Brujas y Brujos", ilustrado por Silvina. Nos contó que su libro favorito había sido "Alicia en el país de las maravillas" del que trajo unas ilustraciones en monocopia realizadas mientras hacía el profesorado. Después nos leyó su libro "Agüita", que ahora ya forma parte del Picnic y mientras la protagonista se transformaba en foca, una nube pasajera dejó caer sobre nosotros unas gotas refrescantes. Tuvimos que proteger los libros del agua y entonces leí "Mucho y poquito" otro de los libros de Silvina como autora integral, con la esperanza de que pasara el chubasco para poder seguir disfrutando de la tarde. Nelly, una vecina del barrio vino por recomendación de una amiga del picnic Silvia que aún no había llegado. Ella se sentó y ofreció su lectura a una nena cuyos papás estaban un poco más lejos tomando mate. En un momento los papás tenían que irse y la nena insistió tanto que tuvieron que quedarse un rato más. Luego llegó Silvia y entre las dos les leyeron lo que los más chiquitos les traían de los manteles.

Una nena, que estaba con su mamá, mientras sus hermanos andaban en bici, nos contó que ella es la del medio y que aprendió a leer antes que su hermano mayor. "La caperucita roja" de Leicia Gotlibowski fue su cuento favorito.
Otro vecino del barrio que resultó ser dibujante, vino con su hija y nos pidió que le avisáramos del próximo encuentro y que trajéramos más libros de historietas. Laura Demarco ya se convrtió en una fan de picnic y se vino otra vez desde lejos.

Entre los amigos estuvieron presentes el guitarrista Claudio Ceccoli que vino obligado por Elena, su hija, Jessica Stecco junto a Marcela Weiss ambas conductoras del programa sobre LIJ "Deja que te cuente" que se transmite los martes a las 13 hs. por BCN Radio.
La ilustradora y escritora Magdi Kelisek nos regaló un libro para el picnic: "Los oficios del lápiz 3", una antología de literatura infantil ilustrada, donde aparece su cuento "Aires de Sapucai" que obtuvo el segundo premio del concurso de Jitanjáfora.

Lúdico ediciones, donó material para el Picnic, el equipo de asistentes sigue creciendo. Julián (19) el fotógrafo oficial delegó parte de su tarea en Anita (16), que además de estar atenta a todo lo que sucede estrenó su tarea de coordinación de actividades. Al grupo se sumó Elena (10), nuestra flamante colaboradora. Lucas (13) ésta vez se quedó estudiando.
Javier, mi esposo, cuando no ejerce su profesión de músico, nos mima con unos ricos mates.
Cada picnic tiene su propio encanto y estamos todos chochos.

Fotos acá.

8.12.13

La Hormiguita Viajera...

Ayer se entregaron los Premios La Hormiguita Viajera 2013. donde tuve el honor de estar presente a través de este blog y también acompañando al grupo de los Casa Cuna Cuenteros. Fue un encuentro con muchas personas que se relacionan con la literatura infantil y juvenil desde distintos ámbitos. Y también fue un encuentro amoroso que permitió darnos un abrazo real entre muchos que sólo nos conocíamos de manera virtual.
Pero como pasa generalmente con los libros, se produce el efecto intertextual, a veces de manera sutil y otras de manera directa. A mi me llevó a buscar mi libro de infancia. Un enorme tomo con tapas duras de Constancio Vigil. Nunca me importó demasiado el texto, porque a decir verdad cuando me regalaron el libro casi no sabía leer, pero si me adentré en la historia fue gracias a sus ilustraciones. Viajé con la hormiga en su mantel y me crucé con cada uno de los personajes, escondida en su canasta de mimbre... o de tinta.
Curiosamente siempre asocié los dibujos a Vigil, hasta hoy, que abrí el libro para sacarle una foto y descubrí, perdido en la portada un sello muy tenue que decía: "ilustraciones de Raúl Stévano".
Gracias Raúl Stévano, tocayo de Eduardo Raúl Burattini, que fue quien nos convocó y abrió las puertas de su hogar para que ayer pudiéramos reunirnos a recibir los premios, a charlar y a disfrutar de un encuentro con la LIJ a través de sus hacedores.
Algunas fotos acá y también acá.